Recuperación activa

Empezamos con la recuperación activa del tendón de Aquiles, sumando a la aplicación de ultrasonidos diaria unos ejercicios muy simples de estiramientos que me ha prescrito Julio.

Ahora que ya parece que el tendón no duele en la vida diaria y que sólo molesta un poco a la presión directa sobre el punto de inflamación (que casi ha desaparecido), va siendo hora de empezar a recuperar de cara a poder trabajar con normalidad después del verano. La idea de aprovechar el verano ya la he descartado porque prefiero no arriesgar y poder volver con total seguridad cuando esté plenamente recuperado.

Finalmente fui al podólogo que estudió mi pisada. Me dijo que tenía que corregir el pie derecho con plantillas (como cuando era pequeño) porque me estaba afectando a la cadera derecha, a la rodilla y al tendón. De todos modos, si con las plantillas (que me van a dar el 1 de agosto... mi santo :) noto que puedo empezar a trabajar también la recuperación con ejercicios de andar-correr, no creo que sea capaz de aguantar.

Para tener una idea de cómo es el ejercicio, incluyo una foto que lo describe a la perfección (no son mis piernas :) Se trata de ir poniendo una mochila con 1 kilo en la espalda e ir aumentando 1 kilo a la semana hasta completar 12 kilos, o sea, una recuperación de 12 semanas para regenerar completamente el tendón.



Lo que estoy notando es que los paseos por la playa me están resultando muy beneficiosos porque flexibilizan todo el arco plantar y me estiran naturalmente el tendón de Aquiles. A ver si me ayudan a acelerar el proceso de recuperación.

En cuanto al karate, no sé si podré volver esta semana; pero si puedo empezar en la segunda quincena de agosto a ir al gimansio no desaprovecharé la ocasión de hacerlo porque ya le tengo muchas ganas.

Ya queda menos... espero

Cada vez parece dar menos jaleo el tendón de Aquiles... ¡vamos, sólo faltaría, si no hago nada que le exija esfuerzo! :)

Ahora tira menos por las mañanas y a lo largo del día, es raro que lo note. Todos los días voy hasta Phi-Clínica de fisioterapia para que me apliquen ultrasonidos y un día a la semana, Julio, ganchea para intentar reducir las ya pequeñas protuberancias que tenía a ambos lados. Según me ha dicho, puede que esta semana empecemos con los ejercicios de recuperación: extensiones, etc.

Además, después de hablar con la nefróloga que me va a consultar para ver de dónde viene el exceso de ácido úrico que parezco tener, estoy tomando Colchimax (a base de colchicina) para prevenir la acumulación de ácido úrico y es posible que también me esté beneficiando en cuanto a la lesión del tendón de Aquiles. Es más, es posible que dicha lesión pueda estar causada precisamente por dicho exceso de ácido úrico.

Por otra parte, este viernes iré al podólogo para que estudie mi tipo de pisada y, si fuese necesario, me ponga unas plantillas que corrijan cualquier posible defecto e impida que mis tendones vuelvan a sufrir.

Vamos, que estoy atacando el problema desde todas las perspectivas, por lo que si no se soluciona es que más me vale cortarme el pie y esperar a que crezca de nuevo como si fuese un rabo de lagartija :)

A ver si en un par de semanas, o sea a principios de agosto, puedo empezar a andar/correr para empezar a recuperar la forma y retomar el entrenamiento, tanto de atletismo como de karate, que tanto me tarda.

Me ha mirado un tuerto

Para rematar todos los problemas que he tenido (y tengo) con el tendón de Aquiles de la pierna derecha, la semana pasada sufrí un ataque de gota en el pie derecho... ¡sí, un ataque de gota!

Me ha subido el ácido úrico por encima de los niveles que debería tener y se me inflamó el dedo gordo y su articulación hasta el punto de doler y no poder calzarme adecuadamente. Sólo podía llevar tenis y no atarlos muy fuerte, por lo que el viernes incluso tuve que faltar al trabajo.

Julio me ha dicho que incluso esta podría ser la causa del mis problemas con el tendón, porque el ácido úrico ataca a este tipo de tejidos y a las articulaciones. Pensemos positivamente y, si logro controlar esa hiperuricemia, es posible que pueda recuperar el tendón y a ver si no me vuelve a pasar. Eso sí, tengo que ir al nefrólogo para intentar descartar cualquier afectación del riñón que pueda estar detrás de estos problemas.

Lo malo es que si empiezo a sumar, llevo más de 2 meses sin hacer nada de deporte y está empezando a afectarme hasta al carácter. Estoy un poco taciturno y no me gusta estar así. Espero remontar en breve y que este blog deje de ser la historia de mis dolencias y pase a ser lo que originalmente fue, la historia de lo que hago día a día para estar en forma.