Puñetero crujido o bendito él

El pasado lunes, después de entrenar y cuando estiraba, sentí un crujido en la rodilla izquierda. Para ser más concretos, en el lateral externo de dicha rodilla.

Iluso de mí, pensé que si habría distendido algún tendón que me estaría sobrecargando el tendón de Aquiles de dicha pierna; pero nada más lejos de mis deseos. El tendón sigue sobrecargado y además ahora tengo un dolor en la rodilla izquierda que me ha aconsejado no entrenar el resto de la semana, así que ha sido una semana en blanco.

Yo creo que me ha venido bien porque he descansado, pero es cierto que estos tres últimos meses están siendo demasiado irregulares. Desde que en agosto tuve problemas con el tobillo izquierdo (probablemente por haber cambiado mi forma de pisar al correr), dicha pierna no ha dejado de darme problemas... vamos, que estoy por volver a talonar al pisar y dejarme de zarandajas.

Mañana voy a volver a probar a correr en cinta (para evitar una superficie más dura como el asfalto por ahora) y además lo voy a hacer con las Excel 33... ¡ou rompe ou racha! Total, para lo que me estaba valiendo la amortiguación de las Nimbus, mejor pruebo ya sin amortiguación y que sea lo que tenga que ser. AINEs y a tirar kilómetros mientras pueda. Además, de esa forma me obligo a ir al gimnasio y por tanto, a entrenar el resto de los días con el programa de ganancia muscular, que es lo que me toca en esta etapa del año.